La temporada 2021 de subastas comenzó con todo y nada menos que con el Porsche 911 de Diego Armando Maradona y un Lancia Delta Integrale que condujo Jorge Recalde en el Campeonato Mundial de Rally. Por supuesto que todos los ítems que hayan pertenecido al genial número 10 son muy coleccionables, pero la gran noticia es a poco más de dos meses de su muerte la casa Bonhams dispone en París su primera subasta del año en la que el espléndido Porsche 911 que utilizó cuando fue jugador del Sevilla será la pieza más destacada, aunque no la más costosa.
La venta lleva el nombre de Bonhams Les Grand Marques Du Monde à Paris y también serán puestos a la venta otros tres autos excepcionales. Se trata de dos GT magníficos, una Ferrari 512BBi de 1987 y un muy exclusivo Touring Superleggera Sciàdepersia de 2017. A ellos se agrega un Lancia Delta Integrale 8V de Grupo A de 1988 que corrió otro argentino notable, Jorge Recalde.
Diego Maradona ha sido uno de los deportistas más extraordinarios del siglo XX, logrando ser el argentino más famoso del mundo. Uno de los mejores jugadores de fútbol de todos los tiempos elegido para alcanzar la categoría de leyenda.
Después de haber ganado la Copa del Mundo en 1986 y el subcampeonato mundial en 1990, el Sevilla contrató a quien fuera el director técnico de Argentina, Carlos Salvador Bilardo, para el bienio 1992-1993. Bilardo a su vez trajo al club al Nº 10 argentino, quien en el Sevilla jugaría por última vez en el fútbol europeo.
Fue en esos días en que el Porsche fue entregado a Maradona, más precisamente el 6 de noviembre de 1992. El Porsche de Diego fue uno de los 1200 ejemplares del 911 964 Carrera 2 Convertible Works Turbo Look.
Considerado un superauto para aquellos días el 911 fue el último convertible de Porsche con el tradicional techo Targa removible. El motor era el nuevo M64 de seis cilindros opuestos refrigerado por aire de 3600 cm3, con block y tapas de aleación de aluminio y árbol de levas a la cabeza. Producía 247 HP a 6100 rpm y el régimen estaba limitado a 6700 rpm. La suspensión delantera era McPherson y la trasera de brazos arrastrados. Su coeficiente aerodinámico era de 0,32, aceleraba de 0 a 100 km/h en 5s5/10 con una velocidad máxima de 261 km/h. Diego, quien fuera del campo de juego era un entusiasta amante de los autos deportivos, usaba el Porsche regularmente para ir desde su residencia, la casa de fin de semana del torero Juan Antonio Ruiz Román, al entrenamiento en el Sevilla. En uno de estos viajes “El Diego” demostró que también era bueno con el pie derecho acelerando, ya que fue interceptado por la policía circulando a 180 km/h por el centro de la ciudad.
Después que Maradona dejó el club en junio de 1993, el Porsche tuvo como segundo propietario a un residente de Mallorca, quien lo conservó durante veinte años. Según se sabe, después pasó por las manos de varios coleccionistas en Francia hasta que el último lo adquirió en 2016.
De acuerdo a Bonhams, el auto es un Porsche 911 Type 964 Carrera 2 Convertible Works Turbo Look de 1992 y con su venta esperan recaudar entre 150.000 y 200.000 euros.
Otro auto muy interesante que será ofrecido en subasta es uno muy cercano también al afecto de los argentinos, un Lancia Delta Integrale con el que Jorge Recalde corrió en el Campeonato Mundial de Rally en 1989. El auto fue registrado en Turín con el número TO 34164 H por Fiat Auto Spa.
El primer rally que corrió este auto fue el East African Safari de Kenia entre el 31 de marzo y el 4 de abril de 1988, conducido por el local Vic Preston Jr., quien abandonó por la rotura de la caja. No volvió a presentarse en el Campeonato Mundial sino hasta un año y dos meses después en el Rally de Acrópolis cuando entre el 27 de mayo y el 1º de junio de 1989 Recalde lo llevó a la quinta posición.
Poco después de correr en Grecia, Fiat vendió el Delta a la empresa financiera Fingold SpA de Milán. El Lancia pasó al equipo Top Run y allí fue cuando Recalde volvió a conducirlo. Se reencontraron en el Rally de Australia, entre el 14 y el 17 de septiembre de 1989, en el que Jorge abandonó en la segunda prueba especial por la rotura de un semieje.
El recordado “Caballo de Lona” volvió a ser su piloto en el cuarto y último rally que corrió este Lancia Delta, nuevamente con los colores del equipo italiano Top Run, el RAC británico con el que concluyó la temporada, entre el 19 y el 23 de noviembre de 1989. Con el italiano Pierangelo Scalvini como navegante, Recalde ocupó la 15ª posición entre los 84 autos que llegaron. En un rally ampliamente dominado por los autos japoneses que ocuparon los nueve primeros puestos, el Delta de Recalde fue el Lancia mejor clasificado.
El Delta fue comprado por un importante coleccionista de autos de rally de Cúneo, Italia en un lote que incluyó los accesorios especiales para el Rally de Kenia. El auto fue restaurado en la configuración del primer rally que corrió, el East African Safari, pintado con los colores de Martini y con los nombres de Vic Preston Jr. y John Lyall, su navegante. Aunque se equivocaron con el número: Preston Jr. utilizó el Nº 20 en Kenia y no el 11 que le pintaron, que fue precisamente el número que empleó en 1990 cuando corrió con un Nissan 200 SX. El monto estimado que se piensa obtener por el Lancia es de entre 240.000 y 280.000 euros.
Los otros autos que formarán parte de la subasta son dos Gran Turismo de distintas épocas. El más antiguo es una Ferrari 512BBi y se trata del segundo modelo de Maranello con el motor bóxer de 12 cilindros. Con la 512 BBi la casa cambió la nomenclatura y en vez de llamarlos por la capacidad de cada cilindro pasó a hacerlo por la cilindrada y el número de cilindros; el 5 surge de sus cinco litros y el 12 de la cantidad de cilindros.
Según la información oficial de Ferrari, la 512 BBi alcanzaba los 302 km/h de velocidad máxima siendo la “i” por inyección. De esta berlinetta fueron producidas 1007 unidades y las estimaciones indican un precio de 160.000 a 200.000 euros.
Finalmente, llegamos al auto más moderno, el más exclusivo y el más caro de los que subastará Bonhams en París. Se trata del Carrozzeria Superleggera Touring Sciàdepersia. Lo construye la legendaria casa de Milán que hizo magníficas carrocerías incluyendo por ejemplo, la del primer auto construido por Ferrari, el Auto Avio Costruzioni 815.
El nombre de este superdeportivo que será subastado, si les suena, proviene de “Shah de Persia” -luego Shah de Irán- y guarda muchas reminiscencias de la Maserati GranTurismo. Y es lógico, está basado en este auto, utilizando su chasis, la unidad motriz y la instalación eléctrica. El Sciàdepersia está impulsado por un V8 de 4700 cm3 que produce 454 HP, acelera de 0 a 100 km/h en 4s8/10 con una velocidad máxima de 301 km/h.
Fue presentado en el Salón de Ginebra de 2018 y los autos a ser subastados, el Sciàdepersia es el más costoso, estimándose que alcanzará entre los 380.000 y 580.000 euros. La subasta se extenderá del 3 al 10 de marzo bajo dos formas, tanto en el website de Bonhams como en la aplicación Bonhams app.
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