La Rossa, Il Cavallino Rampante, la del Commendatore, el Mago de Maranello o simplemente, Ferrari, ha cumplido 1000 presencias en Grandes Premios en el Campeonato Mundial de Fórmula 1. La escudería fundada por Enzo Ferrari -que en sus inicios compitió con Alfa Romeo-, se dio a conocer como constructor el 11 de mayo de 1947 cuando Franco Cortese compitió en el Circuito de Piacenza con la 125 S de la categoría Sport.

Aunque no participó en la carrera inaugural de la Fórmula 1, el Gran Premio Británico en Silverstone, la Scuderia Ferrari, un símbolo de la Fórmula 1 lo hizo por primera vez en la segunda, el 21 de mayo de 1950 en el Gran Premio de Mónaco. Lo hizo con tres 125 V12 de 1500 cm3 con compresor que condujeron el francés Raymmond Sommer y los italianos Luigi Villoresi y Alberto Ascari, segundo en el debut. En todas las temporadas desde 1950, Ferrari utilizó 78 modelos de monoplazas y no estuvo en sólo 27 Grandes Premios.

Las celebraciones coincidieron con el I Gran Premio de la Toscana el 13 de septiembre de 2020, según la reprogramación extraordinaria del Campeonato Mundial que prevé dos carreras por país en domingos sucesivos. Aunque a diferencia de los Grandes Premios anteriores, en Italia fueron utilizados dos autódromos diferentes, Monza y Mugello. Este circuito sobre las colinas de Scarperia, es propiedad de Ferrari desde 1974, el escenario del Grand Prix en el que la Scuderia cumplió tan extraordinario aniversario.

En 1987 un notable grupo de 24 pilotos ferraristas, entre ellos Maria Teresa de Filippis, Cliff Allison, Phil Hill, Piero Taruffi, José Froilán González, John Surtees y Juan Manuel Fangio junto con los que entonces integraban su equipo -Gerhard Berger y Michele Alboreto- lo visitaron en la fábrica para el 40ª aniversario de la compañía. En esta ocasión de las 1000 presencias de Ferrari en el Campeonato Mundial, en cambio, las celebraciones comenzaron el sábado 12 de septiembre y continuaron el domingo a treinta kilómetros de Mugello, en Florencia. En la plaza della Signoria, la Scuderia sorprendió con un show espectacular con una semblanza de la marca Ferrari, danzas acrobáticas en la fachada del Palazzo Vecchio, suelta de banderas por el Banderai degli Uffici, música de flauta y un set de DJ. Sin embargo, el atractivo central fue la exhibición de una réplica de una SF1000 bermellón, pintura especial por las mil presencias, reproducción exacta del color que tenían la 125 S y la 125 F1 que compitió en aquel Gran Premio de Mónaco de 1950. Muy cerca fueron exhibidas otras cinco Ferrari de Fórmula 1 de distintas épocas.

En el Autódromo de Mugello, las Ferrari Nº 5 y 16 que corrieron el 1000º Ferrari Gran Premio de la Toscana, lucieron igual decoración, pintadas de un violáceo color borgoña con el Nº 1000 en los flancos. Los pilotos Sebastian Vettel y Charles Leclerc también vistieron buzos especiales para tan única y especial ocasión. Previo al Gran Premio, Mick Schumacher -integrante de la Academia de Pilotos de Ferrari- dio unas vueltas al circuito en homenaje a la Scuderia, manejando una F2004 de las que su padre Michael, máximo campeón de Ferrari, condujo para ganar el Campeonato Mundial de 2004.

Con el limitado cupo de público, 2880 espectadores presenciaron un accidentado Gran Premio, que tuvo dos accidentes que motivaron dos banderas rojas y dejaron ocho autos fuera de carrera. El triunfador fue Lewis Hamilton escoltado por Valteri Bottas, “1-2” de Mercedes-Benz, con Alexander Albon (Red Bull), quien resultó el primer tailandés en subir al podio en un Gran Premio de F1. Cerrando el clasificador puntuable, Leclerc llegó octavo y Vettel décimo, un resultado que sin embargo no opaca el brillo de la escudería, que con 238 victorias, es la más victoriosa de la Fórmula 1. 

Fotos: Scuderia Ferrari Press Office



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