Gente grande…pero siempre en nuestras charlas automovilísticas, entre Cris Bertschi, Willy y yo, solemos cantar hits pero que timen con temas del deporte motor. Una noche parisina le toco en suerte al príncipe Bira…
E.R.A´s que todo es mentira
E.R.A.s que nada es amor
Que al mundo nada le importa
Bira, Bira
En fin, pongamos las cosas en orden, con las disculpas del caso de discepolín y el príncipe..
El príncipe Bira (Birabongse Bhanudej Bhanubandh) nació en el gran Palacio de Bangkok, lo que era Siam y hoy es la República de Tailandia, el 15 de julio de 1914.
A los 13 años fue enviado por su familia a Londres a completar sus estudios, asistiendo al reconocido Eton College, pasando luego a la renombrada Universidad de Cambridge.
Fue en Eton donde una profesora lo bautizó Príncipe Bira (Prince Bira), sosteniendo que su nombre era demasiado largo y complejo (bien ahí). En las pistas fue también conocido como B. Bira, la B haciendo referencia al azul (blue) de sus autos.
Desde su llegada a Londres estuvo al cuidado de su primo Chula, seis años mayor que él. Este era dueño de una considerable fortuna, y al tiempo fue no solo un guía y segundo padre para Bira, sino su mecenas y sponsor en términos actuales.
En 1934 Bira fue tentado por el vértigo de la velocidad, y Chula que tenía una eterna devoción por su primo menor, compró un Riley Imp con el que aquel debutó con singular soltura en una prueba para autos standard en el mítico circuito de Brooklands.
Poco tardaron en darse cuenta que Bira era más rápido que el auto y fueron por más: un MG Magnette con compresor, luego un Bentley y finalmente un E.R.A. (English Racing Automobiles), con el que el hábil príncipe pudo lucir su estirpe de piloto. Como me gustan los E.R.A…
Para entonces ya habían fundado el White Mouse Garage, un equipo de competición con sede, mecánicos, secretario y camión para traslados de los diversos autos.
Bira, Chula y todo el staff eran asiduos concurrentes a los grandes premios europeos, y conocidos por sus modales, el bajo perfil y lo impecable de la presentación de los autos y del piloto.
En 1936, 1937 y 1938, años donde cosechó gran cantidad de victorias, Bira obtuvo el Golden Star como mejor piloto que otorgaba el British Racing Drivers Club. En esas temporadas gano en total 16 carreras, llegando en las restantes que participó, siempre en los lugares de adelante.
La guerra puso fin a sus actividades automovilísticas, que se retomarían en 1946.
En 1949 vino a la argentina, ya consagrado, en dos oportunidades, marzo y febrero, y luego retornó en diciembre de aquel año quedándose hasta febrero de 1950, donde disputaría una serie de carreras de la denominada Temporada Argentina. Los años de alianza con Chula habían terminado, pero no así su pasión por las carreras.
En Buenos Aires no solo correría en autos y lo haría en forma destacada, también haría un record en planeador y conocería a una persona muy especial, con la que al tiempo se casaría: Celia Chelita Howard.
En 1954 visitaría nuevamente en Buenos Aires, disputando el Gran Premio de la Argentina de Formula Uno, esta vez como piloto oficial Maserati.
Bira fue amén de un gran piloto un destacado deportista, ya que compitió en los juegos olímpicos en yatching, practicó el vuelo en planeador y en avión (unió Londrés y Bangkok en avión en 1952), fue esquiador y golfista.
Con los años ha sido reconocido como uno de los mayores deportistas y representantes de su país, siendo el primer tailandés en competir en la Formula Uno, hasta la aparición de Alex Albon. El autódromo de Tailandia, a las afueras de Pattaya, lleva su nombre.
Bira murió en Londres en 1985 a los 71 años de edad, dejando un legado deportivo de fama mundial.
En el año 2017, la embajada de Thailandia en la Argentina le rindió homenaje, lo que será motivo de otra nota.
Fotos: Chelita Howard, Whitefly y Dandydriver files.
2 comentarios
Lao Iacona · mayo 15, 2020 a las 2:17 pm
Mike querido! Tanto tiempo! Que buena saber de vos y de esa tapa, que sería lindo escanear y publicar aquí, ya que habrá una segunda nota de Bira en breve, de cuando se hizo el homenaje en la embajada de Tailandia.
Mike · mayo 15, 2020 a las 1:51 pm
Excelente nota Lao! Hace unos días, tratando de soportar la cuarentena, me puse a ordenar mis catálogos de subastas y entre los de Brooks hay uno cuya tapa la ilustraban con el Príncipe Bira ya que uno de los lotes era del MG Magnette con el que había corrido.